Los astronautas del futuro podrían usar polvo lunar para obtener energía
11 abril 2017
Los habitantes de la Tierra no tenemos que esperar mucho para ver la luz del Sol. Cada 24 horas, nuestro planeta da una vuelta completa sobre su eje para proporcionarnos un día con su correspondiente noche. Pero, ¿qué pasaría si estuviésemos en la Luna? Nuestro satélite orbita de manera distinta. Puede recibir montones de luz solar durante 14 días y, a continuación, sumirse en la noche durante otros 14 días.
Esto es un problema para los futuros exploradores de la Luna, ya que los paneles solares necesitan recibir los rayos del Sol para producir la tan necesaria electricidad. Al menos ha sido así... ¡hasta ahora! Los científicos de la ESA están investigando una forma de utilizar la capa de polvo que cubre la Luna como si fuese una batería. Durante el día lunar, este polvo absorbe y almacena la energía del Sol. ¿Sería posible liberar esa energía por la noche y utilizarla para producir electricidad?
La superficie de la Luna está cubierta de polvo. ¿Podría utilizarse este polvo para producir energía?
Los investigadores creen que sí. La idea es usar muchos espejos para reflejar los rayos solares en zonas especialmente preparadas del suelo lunar. Allí se colocaría un dispositivo denominado motor térmico. Durante el día, la temperatura del polvo lunar situado cerca del motor podría superar los 100 °C y parte de este calor podría quedar almacenado.
Al llegar la noche, el polvo liberaría gradualmente la energía acumulada para impulsar el motor térmico y, de esta forma, ¡proporcionar electricidad a los astronautas que exploren la luna!
Si todo funciona según lo esperado, los motores términos podrían ser más baratos y eficientes que los paneles solares, e incluso más que los generadores radioactivos, otro método utilizado en la actualidad para suministrar energía. El próximo paso de los investigadores de la ESA es crear una simulación del motor térmico por ordenador. Lo siguiente sería construir un pequeño prototipo del motor para realizar pruebas.
¿Te gustaría vivir en una base lunar que recibiese energía de un motor térmico impulsado por polvo?
Un dato curioso: por la noche, la superficie de la Luna puede alcanzar temperaturas increíblemente bajas, ¡algunas veces inferiores a los 170 °C bajo cero!
