Actualización “cool” de la antena de la red de espacio profundo
La estación de comunicaciones de espacio profundo de la ESA en España ha recibido una nueva actualización
La «alimentación de antena» que conecta la antena física de banda Ka con el transmisor y el receptor de señales electrónicas de la estación ha pasado a enfriarse hasta los -263 °C. Es decir, tan solo 10 grados por encima de la temperatura más fría posible en el Universo.
La refrigeración criogénica de la alimentación reduce el «ruido térmico», esto es, las interferencias de fondo que limitan la sensibilidad y la velocidad de transferencia de datos de nuestras antenas. Ahora, la ESA puede descargar hasta un 100 % más de datos científicos de sus cada vez más complejas misiones científicas, con un aumento de hasta el 80 % en el caso de misiones en el espacio profundo como Juice y BepiColombo.
Esta foto muestra la tecnología de refrigeración criogénica sometida a una prueba de «temperatura de ruido» in situ en las instalaciones del fabricante, Callisto.
Esta actualización forma parte de una serie de actuaciones que se están llevando a cabo en las tres estaciones del espacio profundo de la red 'Estrack' de la ESA, situadas en New Norcia (Australia), Cebreros (España) y Malargüe (Argentina).
«Con estas actualizaciones, la ESA está superando los límites de lo técnicamente posible y permitiendo a los científicos explorar nuevos mundos y recopilar un volumen de datos sin precedentes», afirma Stéphane Halté, ingeniero de la estación terrestre de la ESA.
Estrack es una de las dos únicas redes mundiales de antenas de espacio profundo que existen en la Tierra y constituye una piedra angular de la colaboración internacional de la ESA. Las misiones de la ESA y las de agencias asociadas como la NASA, JAXA e ISRO, así como algunas empresas privadas, confían en Estrack para proporcionar el enlace de comunicación vital entre el control de la misión y las naves espaciales remotas.
La demanda de soporte para Estrack es alta, por lo que la ESA está construyendo una segunda antena en Australia y exprimiendo al máximo el rendimiento de sus antenas actuales mediante el despliegue de nuevas tecnologías, como la refrigeración criogénica de la alimentación de las antenas.
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